Violencia de género y un pedido de ayuda desoído: de los $350 millones para el Encuentro de Mujeres al ministerio de las Mujeres

Si bien desde un momento trató de desligarse, el rol que tuvo la ex ministra de las Mujeres, Ayelén Mazzina fue clave en la violencia de género que sufrió la ex primera dama, Fabiola Yañez en manos del ex presidente, Alberto Fernández. La inacción de la cartera nacional ante el pedido de ayuda, volvió a quedar de manifiesto en las declaraciones que dio este sábado la víctima.

“No se me pidió en su momento. Si hubiera sido así se la hubiera brindado”, aseguró la ex funcionaria de Alberto Rodríguez Saá apenas se conoció la denuncia. Sin embargo, Yañez dio más detalles del auxilio que solicitó al ministerio.

“Me decían ‘vení a verme al despacho en algún momento, yo estoy con vos’. Si estás viendo una situación así, ¿yo tengo que ir a verte a vos?, ¿a tu despacho? Mostré y pedí ayuda. La persona las vio (las imágenes) y ahora me envió un mensaje diciendo: ‘Vos nunca me pediste ayuda. Dijiste que ibas a venir al ministerio’. Si yo iba al ministerio, salía en los diarios”, expresó la ex primera dama.

El arribo de Mazzina al ministerio de Fernández tuvo un momento clave. Fue la organización del 35° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Intersexuales, Bisexuales y No Binaries, que se realizó entre el 8 y 10 de octubre de 2022 en San Luis.

Para eso, la administración de Rodríguez Saá destinó $350 millones, que buscó esconder durante varios meses debido a los tiempos de crisis que vivía la provincia por el avance de la pobreza, luego de dos años de pandemia por Coronavirus.

En ese sentido firmaron un convenio confidencial por el cual se prohibía que se hiciera pública la información, habilitaba a San Luis Sapem a llevar adelante un paquete de contrataciones.

Cuando se conoció el dinero público destinado, hubo un fuerte malestar en los sanluiseños por lo costoso que fue el evento, que hoy sería equivalente a tres meses del Programa Alimentario Nutricional Escolar (PANE), que implementó la gestión actual para hacer frente a la pobreza en los más chicos.

Mazzina estuvo a la cabeza de la planificación desde su rol de secretaria de la Mujer, Diversidad e Igualdad provincial y el 35° Encuentro fue un trampolín para llegar al Gobierno nacional.

Fernández había elogiado la organización del evento que reunió a miles de mujeres y disidencias de distintas provincias y hasta de otros países. Tres días más tarde de que finalizó, la dirigente albertista estaba asumiendo en la gestión de Nación.

“Juro por los derechos conquistados y por los que faltan conquistar”, dijo Mazzina ante el ex presidente. Fue entonces que se encomendó las diversas misiones para las que estaba creado el ministerio. Entre ellas, “prevenir, erradicar y reparar la violencia por razones de género y asistir integralmente a las víctimas en todos los ámbitos en que se desarrollan las relaciones interpersonales”.

Pese a llevar la bandera de los derechos de las mujeres, el padecimiento de Yañez fue ignorado. La misma primera dama cuestionó ayer que “salieron ahora a defenderse cuando no me defendieron a mí, mientras me defenestraban”.